En un mercado laboral tan cambiante y dinámico, en el que la especialización está a la orden del día, es necesario aclarar cuáles son las diferencias que existen entre los Certificados de Profesionalidad y la Formación Profesional.
Ambas acreditaciones, aunque nos resultan similares, no son exactamente lo mismo. En este artículo, aclaramos todas las dudas que pueden surgir entre los dos tipos de formación.
LOS CERTIFICADOS DE PROFESIONALIDAD (CP), ¿QUÉ SON?
En algunos posts anteriores (¿Certificado de profesionalidad Online o Presencial? Pros y Contras, ¿Qué salidas profesionales ofrecen los certificados de profesionalidad?), hemos hecho especial referencia a los Certificados de Profesionalidad.
Aún así y a grandes rasgos, podemos indicar que un Certificado de Profesionalidad es un documento que acredita a un trabajador en una cualificación profesional del Catálogo Nacional de las Cualificaciones Profesionales (casi todas las profesiones que puedes desarrollar en España están recogidas en este catálogo).
El Certificado de Profesionalidad es una titulación oficial, regulada por el Ministerio de Empleo (enlace al ministerio de empleo), que acredita tanto el grado de capacitación de un trabajador en el desarrollo de una actividad laboral, con significado de ocupación, como la formación necesaria para ello.
El perfil que accede a los Certificados de Profesionalidad suele ser, en la mayoría de los casos, el de trabajadores que quieren mejorar sus capacidades y necesitan cierta especialización, personas en situación de desempleo o profesionales de menor cualificación que no han tenido la oportunidad de recibir una formación reglada para las tareas que desempeñan.
Para la obtención de un Certificado de Profesionalidad (Ver «Cómo Obtener Certificado Profesionalidad«) en necesario disponer de algunas de las siguientes acreditaciones. Éstas varían en función del nivel del certificado que se quiera realizar.
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- Certificado de profesionalidad nivel 1. Certificados compuestos por actividades simples que requieren capacidades limitadas. No precisan de requisitos de acceso profesionales ni formativos.
- Certificado de profesionalidad nivel 2. Esta formación demanda conocimientos y capacidades concretas para la realización de actividades.
En cuanto al acceso, será necesario disponer del título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria (ESO); la prueba de acceso a ciclos de grado medio; la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25 años o un certificado de nivel 1 de la misma familia.
- Certificado de profesionalidad nivel 3. En este nivel se contemplan actividades que, tras su finalización, el estudiante tendrá que realizar de forma autónoma, así como demostrar un dominio completo de las técnicas específicas.
Para cursarlo será necesario contar con el título de bachillerato; una prueba de acceso a ciclo formativo de grado superior; un certificado de profesionalidad de nivel 2 de la misma familia o la prueba de acceso a la universidad para mayores de 25.
Algunas de las ventajas que se generan con la formación en Certificados de Profesionalidad son:
La posibilidad de realizar el certificado en modalidad Teleformación. Esta opción resulta especialmente interesante ya que la formación se adapta a las necesidades del estudiante.
Inserción laboral con habilidades específicas para desempeñar un puesto de trabajo concreto. En un mundo en constante cambio, esta especialización supone el acceso a empleos que demandan trabajadores con determinadas capacidades, conocimientos y habilidades.
POR FORMACIÓN PROFESIONAL (FP), ¿QUÉ ENTENDEMOS?
En la página del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, se indica que,
la Formación Profesional del sistema educativo en España prepara al alumnado para la actividad en un campo profesional y adaptarse a las futuras modificaciones laborales, así como para su desarrollo personal y permite su progresión en el sistema educativo”
En este sentido, la LOMCE tiene como objetivo revitalizar la opción del aprendizaje profesional como una opción acorde con la voluntad de un desarrollo personal y su permeabilidad con el resto del sistema.
Para alcanzarlo se propone la modernización de la oferta, su adaptación a los requerimientos de los diferentes sectores productivos, la implicación de las empresas en el proceso formativo, con la importante novedad de la Formación Profesional dual, y la búsqueda de un acercamiento a los modelos de los países de nuestro entorno con niveles mucho menores de desempleo juvenil.
Hablamos de Formación Profesional cuando nos referimos al conjunto de estudios cuyo principal objetivo es la formación socio-laboral desde una doble perspectiva: la de la adquisición y mejora de las cualificaciones y la de la recualificación de las competencias.
Además, permite compatibilizar la promoción profesional, social y personal. Este tipo de aprendizaje aboga por la actualización de conocimientos y capacidades tanto de estudiantes como trabajadores a lo largo de su andadura profesional.
Algunas ventajas que se obtienen de la formación profesional tienen que ver con:
Su salida profesional, pues la formación profesional cuenta con altos índices de inserción laboral.
Su extenso catálogo de titulaciones en diversos sectores profesionales. Es una alternativa adecuada si el alumno busca una especialización enfocada a cubrir un puesto de trabajo.
¿QUÉ TIENEN EN COMÚN AMBAS TITULACIONES LA FORMACIÓN PROFESIONAL Y LOS CERTIFICADOS DE PROFESIONALIDAD?
El punto en común entre ambas formaciones lo encontramos en su base inicial, en las Unidades de Competencia. Éstas son el conjunto que de conocimientos y capacidades que permiten el ejercicio profesional.
Así, un conjunto de unidades de competencia forman la cualificación profesional, siendo los referentes para elaborar las ofertas formativas conducentes a los títulos de Certificados de Profesionalidad y Formación Profesional.