En España, según estudios recientes, 11,3% de los trabajadores sufre de adicción al trabajo, es decir, son personas workaholic o trabajólicos.

La Organización Internacional del trabajo (OIT) afirma que el 8% de los empleados españoles dedica poco más de 12 horas al día a su labor profesional como una forma de evadir las dificultades de su vida personal.

Se trata de personas workaholic o trabajólicos, un padecimiento real que tiene significativas consecuencias sobre su salud física y emocional así como en sus relaciones con los demás.

La adicción al trabajo se evidencia en una necesidad excesiva y obsesiva de trabajar constantemente, incluso en las horas que deberían estar destinadas al descanso y la recreación.

Esta necesidad de efectuar su trabajo a todas horas se ve acompañada por un sentimiento personal de culpabilidad si ocupan su tiempo con actividades de entretenimiento o compartiendo con familiares y amigos.

Qué causa la adicción al trabajo - Workaholic

QUÉ CAUSA LA ADICCIÓN AL TRABAJO

Como muchas adicciones, NO HAY UNA SOLA CAUSA sino que se trata de una combinación de ellas que dan origen a este grave problema:

  • La presencia de problemas económicos y la necesidad de saldar deudas hacen que las personas se sobrepreocupen acerca del dinero que perciben.

    Hacer horas extras o querer destacar en el trabajo de forma compulsiva puede llegar a ser una constante incluso cuando los inconvenientes económicos han desaparecido.

  • La personalidad de los individuos juega un papel clave.

    Algunas personas son más propensas a las adicciones, pero en especial las que poseen rasgos de personalidad tipo A, tienden a involucrarse en distintas tareas pero bajo un enorme stress y hostilidad.

    Ello les supone gestionar de forma inadecuada sus emociones y los retos que supone ciertas cargas de trabajo.

  • Personas con ambición excesiva por el poder y la competitividad evitan delegar tareas en otros y decir que no ante las exigencias de sus supervisores y compañeros.

    Piensan que de esta manera demostrarán de qué son capaces cuando en realidad solo se están sobrecargando innecesariamente.

  • La dificultad para organizarse y planificar estrategias para afrontar el trabajo diario y priorizar las tareas que ello implica puede obligar a los trabajadores a trabajar más horas y fuera de su horario laboral para completar sus objetivos.

    Con el tiempo esto se convierte en un hábito perverso del que es muy difícil salir.

  • Los problemas dentro del círculo familiar o social pueden influir en que una persona se dedique más a su trabajo que a regresar a casa a compartir y descansar.

    Si la situación se prolonga en el tiempo, se transformará en un círculo vicioso.

Descubre si eres un workaholic o trabajólico

Descubre si eres un workaholic o trabajólico

Seguro que algunos compañeros de trabajo o hasta tu jefe te han encontrado trabajando en la oficina cuando todos se han ido.

Quizás eres el que se levanta a medianoche a enviar correos electrónicos de trabajo o tu familia te increpa porque nunca tienes tiempo para salir con ellos o ver una peli, sin estar pendiente del móvil o del ordenador.

Puedes pensar que en el mundo exigente de hoy el trabajo asegura todo y vivir temeroso de perder la seguridad que te proporciona tu empleo.

¡CUIDADO!

Ser un workaholic o trabajólico no es para estar orgulloso, e incluso raya en lo peligroso.

 

A continuación señalamos 10 actitudes y conductas características que pueden ayudarte a descubrir si en realidad eres un adicto al trabajo:

  1. Piensas que trabajar por más de 12 horas está bien y además crees que todas las personas deberían trabajar de esta forma.
  2. Te pierdes todas las reuniones de la familia, los partidos de fútbol de tus hijos y has llegado tarde hasta al matrimonio de tu hija por cuestiones de trabajo.
  3. Has dejado de tener amigos para tener compañeros de trabajo.
  4. Eres el primero en llegar a la oficina y el último en irse.
  5. Hace mucho que no tienes un momento romántico con tu pareja, que no sales a caminar por la naturaleza y no sabes lo que es dormir hasta tarde.
  6. Comes lo que encuentras, no tienes horarios de comida y te has olvidado de tus revisiones periódicas con el médico.
  7. Si alguna vez asistes a una reunión que no sea de trabajo, tu único tema de conversación es tu trabajo.
  8. Si estás resfriado o te sientes mal, igual te alistas para ir a la oficina.
  9. Nunca tomas vacaciones pero si alguna vez te ves obligado, jamás te separas de tu móvil.
  10. Crees que nadie será capaz de hacer tu trabajo por ti por tanto no delegas tus actividades ni a tu jefe.

 

Si aún leyendo estas 10 características de quienes son workaholic o trabajólicos, titubeas y no reconoces que lo eres, ello también cuenta.

Cuando se tiene una adicción lo primero es aceptar que se tiene un problema para trabajar en ello.

Ser workaholic o trabajólico no solo es perjudicial para el propio trabajador.

Ello impacta negativamente en el clima laboral pues impone a los demás un ritmo de trabajo excesivo que genera frustración y mucha insatisfacción.

En este sentido, un líder cauto debe trabajar por detectar a los trabajadores adictos al trabajo en su equipo y poner límites sanos.

En muchas organizaciones se premia esta actitud perjudicial de darlo todo y al máximo sin medir las consecuencias.

Las empresas conscientes terminan entendiendo que se trabaja para vivir y no se vive para trabajar como una medida para alcanzar el éxito personal y profesional.

El trabajo no lo es todo - Evita ser un workaholic

El trabajo no lo es todo

Dejar de ser adicto al trabajo NO ES SENCILLO PERO ES POSIBLE.

Una vez que la persona se da cuenta y toma consciencia de ello no es posible que sea indiferente a su situación, en especial si su familia y amigos se ven afectados por ello.

Una vida con balance entre el trabajo y la vida personal y familiar es esencial para mantener el bienestar y la satisfacción personal.

También es importante para alcanzar logros profesionales y ser exitoso.

Si te has decidido a ir en pos de una vida equilibrada, te dejamos algunas recomendaciones a poner en práctica:

workaholicBusca ayuda de un profesional para gestionar adecuadamente tus emociones y manejar el stress.

 

workaholic

Vivir plenamente no implica grandes gastos e imposiciones.

Empieza cuidando un poco más de ti y de tu familia.

Come a tus horas, duerme las horas recomendadas, realiza ejercicio o una caminata de 20 minutos cada día y comparte con tus seres queridos un tiempo de calidad.

Revisa los hábitos que son enemigos de la productividad y el éxito en este post:

Los malos hábitos de sueño: enemigos de la productividad y el éxito

 

workaholic

Organiza tu tiempo y tus prioridades, con la ayuda de un cronograma para evitar dedicarle al trabajo más tiempo del necesario.

Conoce aquí «Cómo convertir al tiempo en aliado de tu proyecto»

 

workaholic

Practica la atención y la concentración mediante ejercicios de respiración y relajación para llevar a cabo tus tareas de una forma más eficiente.

La práctica del mindfulness puede ayudarte en este sentido.

Revisa nuestro post sobre mindfulness aquí:

Mindfulness ¿una práctica necesaria o una moda empresarial

 

workaholic

Aprende a decir que no y a darte tu espacio.

Delega algunas tareas en tus compañeros y subordinados.

Aprende a trabajar en equipo y a alcanzar los objetivos a través de la colaboración con los otros.

Para más información sobre la relación entre la colaboración y la competencia revisa el siguiente post:

La competitividad como herramienta para la productividad

 

workaholic

Disfruta cada momento de tu vida y práctica la consciencia de estar aquí y ahora.

 

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